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En el ámbito de la fisioterapia, existen diversas técnicas para aliviar los dolores musculares, y una de ellas es la punción seca. En este artículo, quiero explicarte en qué consiste para que puedas evaluar si podría ser beneficiosa para ti.

¿Qué es la punción seca y cómo se aplica?

La punción seca es un método invasivo empleado en fisioterapia que se utiliza para tratar puntos gatillo o nódulos dolorosos en los músculos, que pueden surgir a causa de sobreesfuerzos, movimientos repentinos, entre otros factores. Se denomina «seca» porque no se inyecta ninguna sustancia ni anestesia durante el proceso.

Para realizarla, se emplea una aguja similar a las utilizadas en acupuntura, que se inserta en la piel hasta alcanzar la zona donde se encuentra el punto doloroso. El objetivo de esta técnica es estimular mecánicamente el músculo afectado por estos puntos dolorosos.

Debido a la complejidad de la punción seca, es importante recordar que debe ser realizada exclusivamente por un fisioterapeuta con la formación adecuada.

¿Qué es un punto gatillo?

Los puntos gatillo son áreas sensibles dentro de los músculos que pueden generar dolor en otras partes del cuerpo, conocidos como dolores referidos. Un ejemplo común es cuando se tensa la zona del cuello, provocando dolor que se extiende por la espalda o que desencadena dolores de cabeza, especialmente después de pasar largas horas frente a un ordenador.

¿Es un tratamiento eficaz?

Sí, lo es. La punción seca ha demostrado ser efectiva, con una notable reducción del dolor y una mejora en los síntomas asociados a estos puntos gatillo. Esto ha llevado a que cada vez más personas recurran a esta técnica.

Para optimizar los resultados, la punción seca debe integrarse dentro de un tratamiento de fisioterapia junto con otras técnicas complementarias. Además, una vez que los puntos dolorosos han sido tratados, es esencial que el paciente adopte nuevos hábitos para mantener los beneficios a largo plazo.

Una punción bien ejecutada logra la desaparición de los dolores, tanto en la zona afectada como los dolores referidos, y mejora la circulación sanguínea en la zona tratada, favoreciendo el proceso de recuperación en general.

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